Este mes nos centramos en un tema muy conocido: ¡las alergias! ¿Un poco pronto? Sí, pero las alergias no son un fenómeno estacional, sino todo lo contrario. Es más, es importante preparar bien el terreno y estar tranquilo para la primavera que está a la vuelta de la esquina, porque el polen nunca está lejos. ¿Cómo hacer frente a estos problemas de forma natural? Con nuestro brote estrella: ¡el GROSELLERO NEGRO! ¿Quieres saber más?
¿Alergias KESAKO?
La hipersensibilidad o alergia es una reacción anormal del sistema inmunitario, una pérdida de tolerancia a sustancias aparentemente inofensivas.
En realidad, nuestro organismo se adapta constantemente para mantener una cierta coherencia frente a las múltiples interacciones que mantiene con elementos "externos". El entorno cambia constantemente, y con él aparecen nuevos "agentes extraños" que pueden llevar a nuestro sistema inmunitario a buscar nuevas respuestas ante elementos que no ha encontrado durante su evolución.
Esta adaptación no siempre va bien, y puede provocar problemas como la hiperreactividad del sistema inmunitario, ¡o hipersensibilidad!
La alergia, como se conoce más comúnmente, es el conjunto de manifestaciones clínicas que siguen a una reacción de hipersensibilidad, con síntomas como secreción nasal, estornudos, ojos llorosos o, a más largo plazo, fatiga o insomnio.
Los desencadenantes o alérgenos más comunes pueden proceder de diversos factores:
Factores ambientales interiores: ácaros, polvo, pelo de gato o perro, etc.
Factores ambientales exteriores: polen, moho exterior, contaminación, etc.
Factores ambientales alimentarios: huevos, pescado, cacahuetes, leche, etc.
LA OMS, QUE HA CLASIFICADO LAS ALERGIAS COMO EL SEXTO MAYOR PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA, SEÑALA QUE NO SÓLO SON CADA VEZ MÁS FRECUENTES, SINO TAMBIÉN CADA VEZ MÁS AGUDAS.
Las soluciones naturales
Aunque el número de personas afectadas parece haber aumentado considerablemente en las últimas décadas, en la actualidad existen soluciones eficaces y naturales para tratar el problema.
La yemoterapia concentrada, por ejemplo, puede ayudar a aliviar estas molestias estacionales.
Yemoterapia: grosellero negro
Conocido desde hace siglos como antiveneno, el brote de grosellero negro (Ribes nigrum) está reconocido como un potente antiinflamatorio y drenante universal (capaz de limpiar todo el organismo). Actúa sobre todos los aspectos de la inflamación, especialmente la inflamación alérgica.
El grosellero negro está reconocido como un antiinflamatorio similar a la cortisona. De hecho, aumenta los niveles de cortisol en la sangre gracias a su acción sobre las glándulas suprarrenales. Esto lo convierte en un súper antialérgico con efectos similares a los de la cortisona, pero sin los efectos secundarios, como la somnolencia, de los antialérgicos químicos. Muy conocido para la fiebre del heno, las alergias respiratorias y el asma, no es menos eficaz para las alergias cutáneas.
La grosella negra es la yema más estudiada del mundo por su gran potencia. Cuando se combina con otras yemas, refuerza sus virtudes. Por tanto, es el compañero ideal en una combinación.
Un antiflamatorio natural
Además de estar indicado para combatir los síntomas alérgicos (fiebre del heno, asma, coriza crónica), el brote de grosellero negro también se recomienda para diversos tipos de inflamaciones de cualquier origen, crónicas o no. Su acción antioxidante y su ausencia de efectos secundarios resultan especialmente atractivas para los afectados:
- inflamaciones de todo tipo
- síndrome del intestino irritable
- gastritis
- problemas de piel
- dolores de cabeza
- ORL e infecciones respiratorias (bronquitis, gripe)
- dolores articulares (artrosis, artritis)
Un remedio anti-estres
Problema actual, el estrés crónico es el estrés continuo de la vida cotidiana. Cuando tenemos un problema, nuestro cuerpo no distingue entre estrés grave (peligro mortal) y estrés leve. Las glándulas suprarrenales se vuelven poco a poco locas y la producción de cortisol deja de ser la adecuada. El resultado es agotamiento, fatiga y un sistema inmunitario debilitado. La grosella negra ayuda a regular la función suprarrenal y la producción de cortisol.
¿Cómo utilizarlo?
El macerado de grosellero negro se toma como tratamiento de 1 a 3 semanas de duración.
Empezar con 5 gotas al día en un vaso de agua entre las comidas, y aumentar la dosis a 15 gotas al día si es necesario. Si es necesario, repita el tratamiento de 3 semanas tras una pausa de una semana.
También puede mezclarlo con otros macerados de yemas y brotes jóvenes, como la higuera. En este caso, diluya de 5 a 7 gotas de cada macerado al día en un vaso de agua.
Al igual que el Roble, el Grosellero negro estimula la producción de cortisol, que naturalmente alcanza su máximo por la mañana. Por tanto, es preferible tomar el brote de grosellero negro por la mañana para obtener mejores resultados.
Para los alérgicos
Para los alérgicos crónicos, su toma regular durante 3 meses contribuirá a desensibilizarlos. Reducirá la intensidad y la frecuencia de los síntomas alérgicos. Durante esta fase del tratamiento, puede combinarse con el romero.
Gracias a su acción estimulante y protectora de la función hepática, el romero ayuda a eliminar las toxinas y a liberar el organismo. Su acción antirradicales libres y tonificante alivia el organismo, que recupera su energía.
Contraindicaciones
No recomendado para mujeres embarazadas. Se requiere consejo médico para las personas con problemas renales graves.
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